Increible

Hace un rato llegué de trabajar, sí, otra vez de noche, pero llegué con algo nuevo.
Anoche cuando me subo al auto para ir para mi puesto laboral, vi que tenía algo en el parabrisas, me asomo del lado de adentro y leo:



Esta vecina loca tiene el tupé (si se escribe así) de decirme donde estacionar.
No, no, no.